HOLANDA | Absuelto de incitar al odio racial
El triunfo de Wilders: ¿el fin de la Holanda multicultural?
Geert Wilders escucha el veredicto del tribunal holandés. | Ap
Geert Wilders escucha el veredicto del tribunal holandés. | Ap
Thomas Burmeister (Dpa) | Amsterdam
La fama de Holanda como refugio de la tolerancia multicultural podría ser ya un falso mito, desde que los partidos radicales cambiaran la política de inmigración convirtiéndola en una de integración. En consonancia con ello se ha conocido el fallo de la Justicia contra el xenófobo antiislamista Geert Wilders, que fue absuelto de los cargos de discriminación y fomento del odio contra los musulmanes.
Llamó asesino al profeta Mahoma y al islam una ideología fascista de terroristas, y comparó el Corán con el 'Mein Kampf' de Adolf Hitler. Pero con ello no puede acusarse al líder del populista y xenófobo Partido de la Libertad (PVV), el tercero mayor de Holanda, de incitar el odio contra los musulmanes, consideró hoy el magistrado que presidía el proceso en Amsterdam.
El triunfo del político de 47 años es casi total: tras un proceso de meses, su popularidad está por las nubes. Y poco después del inicio del juicio las encuestas dejaban en evidencia que una condena convertiría al propio Wilders en vencedor como "mártir de la libertad de expresión".
Ahora se muestra como el exitoso defensor de esa libertad. "Se puede criticar el islam, no me pusieron ninguna mordaza", celebra el admirador del ex banquero alemán Thilo Sarrazin -conocido también por sus ideas xenófobas- ante las cámaras de televisión.
Gracias al apoyo de la Justicia, Wilders podrá ahora exigir con más fuerza que nunca la prohibición del Corán y del burka u otros símbolos del islam. Y el autodenominado defensor de la cultura cristiano-judaica podría también luchar contra la "islamización de Europa" y exigir que cese la inmigración de países islámicos.
Su puesta en libertad está en consonancia con la nueva política del gobierno sobre integración extranjera anunciada hace unos días, según la cual los inmigrantes -sobre todo los de religión o cultura diferente- estarán obligados en el futuro a integrarse en la sociedad incluso sin ayuda estatal.
Deberán participar en cursos que tendrán que pagar de su bolsillo y quien no pase el examen pertinente perderá el derecho de residencia.
Así lo contempla la nueva directiva presentada la semana pasada por el primer ministro democristiano Piet Hein Donner, lo que supone nada menos que un adiós definitivo a la "idea de que Holanda es una sociedad multicultural", que domina desde hace años, explicó el jefe de gobierno.
Hay que hacer que sea reconocible la buena y antigua Holanda y que persista "esa Holanda que queremos transmitir a nuestros hijos y nietos". Un país, como le gusta decir a Wilders, "de Henk e Ingrid, y no de Ahmed y Fátima".
El líder de la oposición socialdemócrata, Job Cohen, criticó la medida como un "error histórico" en política de integración, al considerar que los inmigrantes, a quienes se les dice "adáptense o desaparezcan", querrán vengarse. "En unos años nos pasará factura".
El Gobierno argumenta al contrario que Holanda enfrentará disturbios si no actúa y por eso quiere poner fin a que los hijos de inmigrantes aprendan la cultura de sus países de origen, frenando así además el flujo de inmigrantes.
Suena casi exactamente igual al programa electoral con el que Wilders se presentó el año pasado a las elecciones, de las que su partido salió como tercera fuerza. El PVV tolera ahora la coalición de democristianos y liberales de derecha en minoría y apenas se toma una decisión sin su consentimiento.
El Gobierno, criticado por otras medidas como los recortes económicos, cuenta sin embargo con el apoyo de la población en este "giro a lo Wenders" en política de integración. Unos tres cuartos de los holandeses lo apoyan, según las encuestas. E incluso lo hace el 50 por ciento de los votantes de los socialdemócratas y los verdes de izquierda. En total, el 83 por ciento apoya la prohibición del burka siguiendo el ejemplo de Francia
POR CÁ O SOBADO TEM SAÍDO CARO AOS PORTUGUESES.MAS OS INTERNACIONALISTAS, EMBORA DISFARÇADOS DE "DIREITA" SÃO AOS MONTES.AINDA ANDAM NA IMPORTAÇÃO, COMO A PRESIDENTA DA CÂMARA DE VILA DE REI, PORQUE TÊM CÁ POUCOS...
O DÉFICE DEPOIS CRESCE.MAS A CULPA E ESCÂNDALO PÚBLICO DEPOIS SÃO 8,4 MILHÕES DE EUROS EM ALEGADOS VENCIMENTOS PAGOS A "MAIS" NAS FORÇAS ARMADAS COM LEIS MANHOSAS E MAL FEITAS.MAS CIMEIRAS AFRICANAS AOS 60 MILHÕES ERAM UM ENRIQUECIMENTO, POIS QUE HAVIA QUE EXPORTAR PARA DEPOIS SER "PERDOADA A DÍVIDA"!!!!TAL COMO A PRESIDENTA DA CÂMARA AGORA ALEGA QUERER EXPORTAR "CHOURIÇOS"!!!
PERDOAI-LHES SENHOR QUE ELES NÃO SABEM O QUE FAZEM...
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