PRODI E NÓS

.- Muchos consideran que el polémico decreto sobre seguridad recientemente aprobado en Italia, y que permite la expulsión de Italia de ciudadanos comunitarios por motivos de alarma social, puede provocar una oleada de racismo y xenofobia.

R.- Cada país en casos extremos, y garantizando siempre los derechos de los ciudadanos, debe poder llevar a cabo expulsiones rápidas. Las expulsiones llevadas a cabo en nombre de este decreto deben ser ratificadas por un juez, lo que ya supone una garantía. Y por el momento las expulsiones que se han llevado a cabo son poquísimas, como era de esperar por el espíritu y la letra de esta ley. Nosotros no deseábamos expulsiones de masa.

Aquí también los medios de comunicación italianos han malinterpretado a sabiendas el contenido de esa legislación. Lo que yo quería era que cuando se verificasen situaciones de especial gravedad y de fuerte daño a la vida de la comunidad se pudiera actuar con gran rapidez, pero dando evidentemente a la persona objeto de esta expulsión la posibilidad de apelar a un magistrado.

Actuando con sabiduría, nuestros jefes de Policía han recurrido a este decreto en pocas decenas de casos, no llegan a 200. Pero le puedo asegurar que este decreto es muy importante para la seguridad de los ciudadanos italianos y de los ciudadanos extranjeros.

Al final, esta ley será la mejor garantía contra el racismo, porque si no transmitimos un mensaje de seriedad y severidad respecto a la inmigración, entonces es cuando el racismo aumenta.

P.- Ese decreto se ha aprobado después de una serie de crímenes cometidos fundamentalmente por rumanos y, concretamente, tras el asesinato y violación de la esposa de un militar por un ciudadano de ese país. ¿No debería haberse hecho con la cabeza más fría y sin ceder a las presiones de la opinión pública?

R.- Mire, yo no he cedido a una emoción cuando he aprobado ese decreto. Además, lo único que ha hecho este decreto es dar ejecución inmediata a un proyecto de ley ordinario que ya estaba ahí. No es que, dejándonos llevar por una ola de emoción, nos hayamos inventado estas normas. Únicamente que, por las presiones de la opinión publica, lo hemos aprobado rápidamente, pero yo no he cambiado ni una línea.

EXPULSÃO DE CIDADÃOS COMUNITÁRIOS... O QUE NÃO SERÁ COM OS EXTRA-COMUNITÁRIOS...
POR CÁ A SOLUÇÃO É A "NACIONALIZAÇÃO" COMO SE FOSSE POSSÍVEL DE MISTURAR ÁGUA E AZEITE...