Un individu plusieurs fois condamné
Mots clés : Fusillade, Tourcoing, Lille, Faycal Mokhtari
Par lefigaro.fr
Fayçal Mokhtari a fait plusieurs séjours en prison pour vols, escroquerie ou trafic de stupéfiant et serait «extrêmement violent». Il pourrait avoir fui en Belgique.
L'identité de l'auteur présumé de la fusillade devant une boîte de nuit lilloise, qui a coûté la vie à deux personnes, est désormais publique. Fayçal Mokhtari, 32 ans, habitant dans la ville frontalière de Tourcoing, est activement recherché par la police pour qui il est loin d'être un inconnu.
L'homme qui a ouvert le feu dans une discothèque de Lille, tuant deux personnes, pourrait avoir fui vers la Belgique. Une information judiciaire pour assassinat a été ouverte.
ENTRETANTO OS TRABALHADORES EUROPEUS SÃO CONDENADOS A NIVELAR POR ÁFRICA.
PERTENCE CERTAMENTE AO submundo da blogosfera DE ACORDO COM CIENTÍFICAS CLASSIFICAÇÕES DUNS GAJOS QUE VIVEM DOS MEUS IMPOSTOS E ANDAM A AFUNDAR PORTUGAL
Monday, July 2, 2012
MENOS UM COLONO.TERÁ DIREITO AO ENTERRO DE BORLA PELA SERVILUSA?
Jovem de 23 anos assassinado em rixa
Publicado em 2012-06-30
Um jovem de 23 anos morreu este sábado durante uma rixa em Casal de Cambra, na Linha de Sintra, e outro sofreu ferimentos graves na cabeça, disse hoje à agência Lusa fonte da PSP.
De acordo com a PSP, o homicídio ocorreu às 05:00 na Rua Frei Gaspar Bernardino, na sequência de uma discussão que envolveu um grupo num café e que depois "resolveu a contenda na rua".
A vítima mortal foi esfaqueada e um amigo ficou ferido com gravidade na cabeça, tendo sido transportado para o hospital Amadora-Sintra.
A Polícia Judiciária está no local a fazer diligências e a ouvir as testemunhas, ficando a partir de agora encarregada do caso, indicou a PSP.
E OS NOSSOS INTERNACIONALISTAS DE DESCOLONIZADORES PASSARAM A COLONIZADORES.POR NOSSA CONTA CLARO...
Publicado em 2012-06-30
Um jovem de 23 anos morreu este sábado durante uma rixa em Casal de Cambra, na Linha de Sintra, e outro sofreu ferimentos graves na cabeça, disse hoje à agência Lusa fonte da PSP.
De acordo com a PSP, o homicídio ocorreu às 05:00 na Rua Frei Gaspar Bernardino, na sequência de uma discussão que envolveu um grupo num café e que depois "resolveu a contenda na rua".
A vítima mortal foi esfaqueada e um amigo ficou ferido com gravidade na cabeça, tendo sido transportado para o hospital Amadora-Sintra.
A Polícia Judiciária está no local a fazer diligências e a ouvir as testemunhas, ficando a partir de agora encarregada do caso, indicou a PSP.
E OS NOSSOS INTERNACIONALISTAS DE DESCOLONIZADORES PASSARAM A COLONIZADORES.POR NOSSA CONTA CLARO...
Sunday, July 1, 2012
QUEM FORAM OS "PORTUGUESES" FUGIDOS NA ARGELIA "LIBERTADA"?FORAM OS MESMOS QUE SE ALIARAM E PROMOVERAM A "DESCOLONIZAÇÃO" E AGORA NOS "COLONIZAM"...
Huir de Argelia
Decenas de miles de franceses, muchos de origen español, emigraron de Argelia al Levante español hace 50 años cuando Francia concedió la independencia a su última colonia magrebí.
Mientras, los refugiados republicanos en Orán y Argel volvían a exiliarse, esta vez en Francia.
Franceses nacidos en Argelia hacen en Alicante campaña a favor del sí en el referéndum organizado por Franco en 1966. / PERFECTO ARJONES
Junto a su familia, José Falcón corrió con todas sus fuerzas, hace ya 50 años, hasta el portaaviones La Fayette atracado en Orán. Quería poner a salvo, en su bodega, a su mujer, Hélène, y a sus tres hijos. El barco de guerra estaba lleno hasta la bandera con refugiados como él y cientos de harkis, los mercenarios argelinos que lucharon junto al Ejército francés en la guerra de la independencia de Argelia.
“Los moros cortaban las cabezas de los europeos, había que escaparse”, recuerda Falcón, barcelonés de 96 años, en su modesto chalé adosado de Toulouse. Atrás dejaba entonces 23 años de exilio en la Argelia francesa. Falcón fue aviador republicano, el que libró el último combate aéreo en los cielos de Cataluña en febrero de 1939, derribando a un Messerschmitt alemán. Cruzó los Pirineos, pasó unas semanas en los campamentos de concentración del sur de Francia y emigró a Orán, donde había sido invitado por su tío.
Ese día, el 5 de julio de 1962, iba a proclamarse la independencia de Argelia, pero horas antes los disparos en el transcurso de una manifestación de alegría de argelinos en la plaza de Armas de Orán, la segunda ciudad del país, desataron primero el pánico y después una matanza de europeos perpetrada por el Ejército de Liberación Nacional, la resistencia armada argelina, y civiles espontáneos provistos de armas blancas.
Dispararon contra las terrazas de los cafés, contra los automovilistas; hubo ejecuciones sumarias, secuestros, ahorcamientos y mutilaciones y enucleaciones en plena calle hasta que, con horas de demora, el general francés Katz ordenó a sus 18.000 soldados que interviniesen. El balance de víctimas oscila, según las fuentes, entre 400 y 3.000 muertos y desaparecidos en tres horas. Aunque muchos habían huido de Orán las semanas anteriores, aún quedaban en la ciudad más de cien mil europeos.
“Gentes aterrorizadas corrían por todas partes, me gritaban que me escondiera en algún portal, en algún local”, recuerda Sylvie Ambros, oranesa de 85 años. Llevaba días recluida en el hotel Univers, que regentaba su padre en el centro de Orán, pero se había arriesgado a echarse a la calle para comprar comida para su bebé. “Pensé que el local, en vez de ser un refugio, podía convertirse en una ratonera y opté por regresar al hotel”, prosigue. “En él se hospedaban militares franceses que me inspiraban seguridad”, añade.
El día en que se proclamó la independencia de Argelia cientos de europeos fueron asesinados en Orán
Cuatro semanas después, Sylvie Ambros también se dirigió al puerto con su hija y sus padres para embarcar, “gracias a un enchufe, porque había bofetadas para subir a bordo”, pero no eligió el mismo destino que José Falcón. Zarparon rumbo a Alicante, a 290 kilómetros de Orán. Regresaba a la tierra de sus antepasados porque, aunque habían adquirido la nacionalidad francesa, los Ambros eran de origen valenciano. Ahora reside, junto con su hermana, en pleno centro de Alicante, que, según Sylvie, “tiene mucho en común con Orán, aunque es más seco y algo más caluroso”.
Para José Falcón, la independencia de Argelia supuso un segundo y doloroso exilio. Para Sylvie Ambros, la vuelta al país de sus ancestros, aunque perdiendo buena parte de su patrimonio. Para España, la descolonización de Argelia tuvo consecuencias migratorias y políticas porque buena parte de los 1,2 millones de europeos que allí residían eran españoles o de origen español. En Orán eran incluso mayoría (65%), y la calle hablaba español, y en Argel eran hegemónicos en el populoso barrio de Bab el Oued.
Desde que Francia inició la conquista de Argelia, en 1830, valencianos, murcianos y almerienses empezaron a expatriarse en busca de trabajo y no tardaban en obtener la nacionalidad francesa que París les otorgaba para incrementar el peso demográfico de los europeos frente a la mayoría de musulmanes argelinos.
La última gran oleada de inmigrantes españoles llegó coincidiendo con el final de la Guerra Civil cuando el carbonero Stanbrook zarpó de Alicante, el 28 de marzo de 1939, atestado con 2.638 pasajeros. Mientras, los últimos aviones de la República volaban hacia el oeste de Argelia. En total, más de 7.000 españoles se exiliaron en la colonia al acabar la contienda. No siempre la adaptación fue fácil.
“Me produjo un choque ver a los moros preparar el té en el barco que me trasladó de Marsella a Orán” en el verano de 1939, rememora José Falcón, que había oído hablar de las matanzas perpetradas por los soldados rifeños a sueldo de Franco durante la Guerra Civil. “Me esperaba ver allí la sabana africana y sus leones, pero aquello se parecía más bien a la calle de Pelayo de Barcelona”, añade.
Su último golpe emocional se lo proporcionó, 25 años después, la Gendarmería cuando, al instalarse en Francia, sacó la oposición de mecánico del cuerpo. “Coger la plaza suponía trabajar para aquellos que custodiaron los campos [de concentración] en los que estuve con mis compañeros en el sur de Francia”, explica Falcón. Superó sus reticencias y guarda un grato recuerdo de su último empleo.
Entre abril y agosto de 1962 cerca de 50.000 emigrantes procedentes de Argelia llegaron a España, el 70% a Alicante
“A mí me impresionaban los fantasmas de las calles de Argel”, recuerda Antonio Asensio, de 73 años, refiriéndose a las mujeres vestidas con largas túnicas blancas que les cubrían la cabeza y solo dejaban su rostro al descubierto. Cuando tenía 11 años, Asensio voló en avión de Valencia a Argel pare reunirse con su padre allí exiliado. “A bordo, los pasajeros se despedían de su tierra cantando El emigrante”, asegura.
Los exiliados republicanos se trasladaron en 1962 a la metrópoli, pero decenas de miles de pieds-noirs (franceses nacidos en Argelia), de españoles que habían adquirido la nacionalidad francesa y otros emigrantes valencianos que aún no la tenían embarcaron en transbordadores, cargueros, barcos de recreo y hasta en veleros rumbo a Santa Pola, Jávea, Águilas, Cartagena y, sobre todo, Alicante.
“2.200 españoles llegaron de Orán”, titulaba en portada, el 1 de julio de 1962, el diario Información de Alicante. La víspera fue el día del mayor desembarco, pero entre abril y agosto de 1962 arribaron al sureste de la Península 50.000 inmigrantes procedentes de Argelia, el 70% a Alicante, según el periodista francés Leo Palacio, autor de un libro sobre los pieds-noirs. De ese aluvión, la prensa española apenas habló. Es verdad que para algunos España solo fue un país de tránsito.
El aviador republicano José Falcó, de 96 años, en Toulouse. / PIERRE CHALLIER
Cuando en junio el goteo de pesqueros abarrotados de franceses se acentuó, el alcalde falangista de Alicante, Agatángelo Soler, llamó al ministro de Asuntos Exteriores, Fernando Castiella. Le pidió que España facilitara la salida de los miles de españoles que se agolpaban en el puerto de Orán. Le hizo esperar 20 minutos y le anunció “que salían para Argelia dos transbordadores escoltados por barcos de guerra para traerse a aquella gente”, declaró el alcalde a Información.
La orden la dio el propio general Franco, pero otro general, Charles de Gaulle, tardó tres días hasta autorizar a atracar al Virgen de África y al Victoria en Orán. Cuando los buques volvieron a España, sus pasajeros desembarcaron dando vivas a Franco. No tardarían en tener aún más motivos de agradecimiento al dictador.
Las autoridades les documentaron y les ayudaron a encontrar alojamiento; la Cruz Roja atendió a los enfermos y la prensa local publicó sus nombres para ayudar a las familias separadas a encontrarse. Muchos habían llegado con lo puesto a Alicante y “los bancos les concedieron facilidades crediticias de las que nunca se beneficiaron los españoles”, sostiene Leo Palacio.
Con esos créditos abrieron supermercados, bares, restaurantes, discotecas, lavanderías, joyerías, pastelerías, etcétera. El 20% de los locales de ocio de Alicante “están en manos de nuestros compatriotas”, estimaba en 1970 el cónsul de Francia en la ciudad, Petiot de Laluisant, en un informe dirigido a su embajador en Madrid.
Robert Tabarot, que fue la figura más célebre del exilio francés en el Levante, inauguró entonces una pizzería en Benidorm. El Ayuntamiento le concedió un permiso excepcional para que permaneciese abierta hasta las seis de la madrugada “mientras todos sus competidores españoles debían cerrar mucho antes”, prosigue Palacio.
Veintitrés años antes, el carbonero Stanbrook había permanecido 72 horas ante las puertas del puerto de Orán pese al hacinamiento de sus pasajeros republicanos y a la escasez de víveres para alimentarlos. Cuando, por fin, desembarcaron, las mujeres y los niños fueron trasladados a una cárcel que iba a ser desmantelada y muchos hombres válidos fueron enviados a la fuerza a construir el ferrocarril transahariano. El contraste entre la acogida que brindó España a los inmigrantes de Argelia y Francia a los exiliados republicanos es apabullante.
Por algo Le Courrier du Soleil, el semanario que fundaron los franceses en Alicante, describía a Franco como el “Moisés de los tiempos modernos” y traducía al francés los editoriales de Arriba, el órgano del Movimiento Nacional, ese partido único sui generis que encabezaba el propio dictador.
El fervor franquista de los pieds-noirs les llevó a hacer campaña por el sí en el referéndum de diciembre de 1966 que supuso una puesta al día del régimen de Franco. Caravanas de coches con pancartas pegadas al capó en las que se podía leer Oui = Sí o manifestantes portando rótulos ensalzando a Franco recorrieron las calles de Alicante.
Agatángelo Soler, el alcalde, contaba que un puñado de emigrantes procedentes de Argelia acudió al Ayuntamiento “a romper sus pasaportes” franceses. Eran los más radicales, aquellos que renegaban de una patria que les había "traicionado" al conceder la independencia a la tierra en la que habían nacido.
Buena parte de los jefes de la Organización del Ejército Secreto (OAS, según sus iniciales en francés), que causó 2.200 muertos en su lucha contra la independencia, acabaron o, al menos, pasaron por Alicante. “Aquí estaban fuera del alcance de la justicia francesa y ni uno de ellos fue extraditado a Francia por las autoridades españolas”, recalca Juan David Sempere Souvannavong, profesor de la Universidad de Alicante que ha investigado a fondo el exilio de los pieds-noirs en España.
“Al principio debía acudir a diario a firmar en la comisaría de El Campello (Alicante)”, señala François Andugar, de 75 años, hijo de padres españoles emigrantes a Argel, exparacaidista francés y después agente de la OAS con numerosos golpes en su historial. “A los de la OAS, la policía española no nos perdía de vista”, añade.
Aun así, él y medio centenar de hombres de acción de la OAS se reagruparon, a finales de 1962, en Vallfogona (Lleida), en un campo de entrenamiento. “Aprendíamos a atracar bancos porque la prioridad era obtener fondos para reconstituir la organización en Francia y, algún día, atentar contra De Gaulle”, prosigue. El proyecto fracasó.
Andugar confirma así un rumor, recogido entonces por la prensa francesa, sobre la existencia en España de campos de la OAS, pero sin aportar pruebas. “Hubo otro recinto de entrenamiento, efímero, por Vistahermosa”, pegado a Alicante, revela Jean Leonard Decouty, de 81 años, otro miembro de la OAS, pero que nunca estuvo en Argelia. “Luché desde la metrópoli”, explica, y para librarse de la justicia huyó a Alicante, donde abrió un restaurante de postín.
Decouty evoca con nostalgia el paso por Alicante de los cabecillas de la OAS como Joseph Ortiz o Pierre Lagaillarde, exdiputado de Argel, que consiguió un empleo en el economato del colegio francés que abrieron los pieds-noirs, en 1962, tras hacer una colecta. La mujer de Lagaillarde impartía clases de física.
“Qué duda cabe que al principio el colegio tenía un tufillo a OAS”, reconoce Manuel García, de 77 años, hijo de emigrantes alicantinos a Argel, que fue director del establecimiento en los ochenta. “El Ministerio de Educación [francés] lo observaba con recelo” y, tras su fundación, tardó una década hasta otorgarle su reconocimiento.
Para aquellos capitanes de la OAS, España no era una tierra extraña. Su organización fue fundada en Madrid, en el hotel Princesa, en diciembre de 1960, por el general Raoul Salan ayudado por Ramón Serrano Suñer, el cuñadísimo de Franco.
La impronta de la OAS aún persiste, medio siglo después, entre la colonia francesa en Alicante. El candidato del Frente Nacional en las legislativas francesas de junio para la circunscripción de la península Ibérica fue un pied-nord, Alain Lavarde, de 66 años, hijo de un agente de aquel ejército secreto que tantos atentados perpetró. Está orgulloso de su resultado: “Obtuve el 22,8% de los sufragios en Alicante, un porcentaje que triplica a mi media en España”.
OS ARGELINOS TÊM DIREITOS "SAGRADOS" DESDE QUE PISEM SOLO FRANÇÊS.JÁ OS FRANCESES QUE SE INSTALEM NA ARGÉLIA PODEM MUITO BEM CONTINUAR A SER MORTOS...
SÃO ESTAS RECIPROCIDADES QUE SE APLICA, TAMBÉM POR CÁ.TEORIZADOS POR UMA PEQUENA MINORIA QUE SE DESAPARECESSE ERA UM ALÍVIO PARA A NAÇÃO PORTUGUESA POIS QUE TRAIDORES UMA VEZ, TRAIDORES SEMPRE! TANTO DESCOLONIZAM, COMO COLONIZAM SEMPRE COM GRANDES DESGRAÇAS PARA O ZÉ POVINHO QUE ELES ENGANAM COM O SEU "SISTEMA" DE PROPAGANDA TRAIDORA!!!DAQUELA QUE LHES FOI ENSINADA LÁ FORA E QUE AQUI ANDAM A TENTAR APLICAR APESAR DOS SEUS MESTRES JÁ TEREM FALIDO HÁ MUITO TEMPO...EMBORA ANDEM SEMPRE A ESCOLHER NOVOS "SÓIS" À MEDIDA QUE ELES VÃO CAINDO...
OS PATRIOTAS PORTUGUESES ESSES ANDAM COBARDEMENTE CALADOS OU VENDERAM-SE POR UM PRATO DE LENTILHAS DA MESA DO ORÇAMENTO...SÃO OS VIRAS CASACAS TRADICIONAIS!
Decenas de miles de franceses, muchos de origen español, emigraron de Argelia al Levante español hace 50 años cuando Francia concedió la independencia a su última colonia magrebí.
Mientras, los refugiados republicanos en Orán y Argel volvían a exiliarse, esta vez en Francia.
Franceses nacidos en Argelia hacen en Alicante campaña a favor del sí en el referéndum organizado por Franco en 1966. / PERFECTO ARJONES
Junto a su familia, José Falcón corrió con todas sus fuerzas, hace ya 50 años, hasta el portaaviones La Fayette atracado en Orán. Quería poner a salvo, en su bodega, a su mujer, Hélène, y a sus tres hijos. El barco de guerra estaba lleno hasta la bandera con refugiados como él y cientos de harkis, los mercenarios argelinos que lucharon junto al Ejército francés en la guerra de la independencia de Argelia.
“Los moros cortaban las cabezas de los europeos, había que escaparse”, recuerda Falcón, barcelonés de 96 años, en su modesto chalé adosado de Toulouse. Atrás dejaba entonces 23 años de exilio en la Argelia francesa. Falcón fue aviador republicano, el que libró el último combate aéreo en los cielos de Cataluña en febrero de 1939, derribando a un Messerschmitt alemán. Cruzó los Pirineos, pasó unas semanas en los campamentos de concentración del sur de Francia y emigró a Orán, donde había sido invitado por su tío.
Ese día, el 5 de julio de 1962, iba a proclamarse la independencia de Argelia, pero horas antes los disparos en el transcurso de una manifestación de alegría de argelinos en la plaza de Armas de Orán, la segunda ciudad del país, desataron primero el pánico y después una matanza de europeos perpetrada por el Ejército de Liberación Nacional, la resistencia armada argelina, y civiles espontáneos provistos de armas blancas.
Dispararon contra las terrazas de los cafés, contra los automovilistas; hubo ejecuciones sumarias, secuestros, ahorcamientos y mutilaciones y enucleaciones en plena calle hasta que, con horas de demora, el general francés Katz ordenó a sus 18.000 soldados que interviniesen. El balance de víctimas oscila, según las fuentes, entre 400 y 3.000 muertos y desaparecidos en tres horas. Aunque muchos habían huido de Orán las semanas anteriores, aún quedaban en la ciudad más de cien mil europeos.
“Gentes aterrorizadas corrían por todas partes, me gritaban que me escondiera en algún portal, en algún local”, recuerda Sylvie Ambros, oranesa de 85 años. Llevaba días recluida en el hotel Univers, que regentaba su padre en el centro de Orán, pero se había arriesgado a echarse a la calle para comprar comida para su bebé. “Pensé que el local, en vez de ser un refugio, podía convertirse en una ratonera y opté por regresar al hotel”, prosigue. “En él se hospedaban militares franceses que me inspiraban seguridad”, añade.
El día en que se proclamó la independencia de Argelia cientos de europeos fueron asesinados en Orán
Cuatro semanas después, Sylvie Ambros también se dirigió al puerto con su hija y sus padres para embarcar, “gracias a un enchufe, porque había bofetadas para subir a bordo”, pero no eligió el mismo destino que José Falcón. Zarparon rumbo a Alicante, a 290 kilómetros de Orán. Regresaba a la tierra de sus antepasados porque, aunque habían adquirido la nacionalidad francesa, los Ambros eran de origen valenciano. Ahora reside, junto con su hermana, en pleno centro de Alicante, que, según Sylvie, “tiene mucho en común con Orán, aunque es más seco y algo más caluroso”.
Para José Falcón, la independencia de Argelia supuso un segundo y doloroso exilio. Para Sylvie Ambros, la vuelta al país de sus ancestros, aunque perdiendo buena parte de su patrimonio. Para España, la descolonización de Argelia tuvo consecuencias migratorias y políticas porque buena parte de los 1,2 millones de europeos que allí residían eran españoles o de origen español. En Orán eran incluso mayoría (65%), y la calle hablaba español, y en Argel eran hegemónicos en el populoso barrio de Bab el Oued.
Desde que Francia inició la conquista de Argelia, en 1830, valencianos, murcianos y almerienses empezaron a expatriarse en busca de trabajo y no tardaban en obtener la nacionalidad francesa que París les otorgaba para incrementar el peso demográfico de los europeos frente a la mayoría de musulmanes argelinos.
La última gran oleada de inmigrantes españoles llegó coincidiendo con el final de la Guerra Civil cuando el carbonero Stanbrook zarpó de Alicante, el 28 de marzo de 1939, atestado con 2.638 pasajeros. Mientras, los últimos aviones de la República volaban hacia el oeste de Argelia. En total, más de 7.000 españoles se exiliaron en la colonia al acabar la contienda. No siempre la adaptación fue fácil.
“Me produjo un choque ver a los moros preparar el té en el barco que me trasladó de Marsella a Orán” en el verano de 1939, rememora José Falcón, que había oído hablar de las matanzas perpetradas por los soldados rifeños a sueldo de Franco durante la Guerra Civil. “Me esperaba ver allí la sabana africana y sus leones, pero aquello se parecía más bien a la calle de Pelayo de Barcelona”, añade.
Su último golpe emocional se lo proporcionó, 25 años después, la Gendarmería cuando, al instalarse en Francia, sacó la oposición de mecánico del cuerpo. “Coger la plaza suponía trabajar para aquellos que custodiaron los campos [de concentración] en los que estuve con mis compañeros en el sur de Francia”, explica Falcón. Superó sus reticencias y guarda un grato recuerdo de su último empleo.
Entre abril y agosto de 1962 cerca de 50.000 emigrantes procedentes de Argelia llegaron a España, el 70% a Alicante
“A mí me impresionaban los fantasmas de las calles de Argel”, recuerda Antonio Asensio, de 73 años, refiriéndose a las mujeres vestidas con largas túnicas blancas que les cubrían la cabeza y solo dejaban su rostro al descubierto. Cuando tenía 11 años, Asensio voló en avión de Valencia a Argel pare reunirse con su padre allí exiliado. “A bordo, los pasajeros se despedían de su tierra cantando El emigrante”, asegura.
Los exiliados republicanos se trasladaron en 1962 a la metrópoli, pero decenas de miles de pieds-noirs (franceses nacidos en Argelia), de españoles que habían adquirido la nacionalidad francesa y otros emigrantes valencianos que aún no la tenían embarcaron en transbordadores, cargueros, barcos de recreo y hasta en veleros rumbo a Santa Pola, Jávea, Águilas, Cartagena y, sobre todo, Alicante.
“2.200 españoles llegaron de Orán”, titulaba en portada, el 1 de julio de 1962, el diario Información de Alicante. La víspera fue el día del mayor desembarco, pero entre abril y agosto de 1962 arribaron al sureste de la Península 50.000 inmigrantes procedentes de Argelia, el 70% a Alicante, según el periodista francés Leo Palacio, autor de un libro sobre los pieds-noirs. De ese aluvión, la prensa española apenas habló. Es verdad que para algunos España solo fue un país de tránsito.
El aviador republicano José Falcó, de 96 años, en Toulouse. / PIERRE CHALLIER
Cuando en junio el goteo de pesqueros abarrotados de franceses se acentuó, el alcalde falangista de Alicante, Agatángelo Soler, llamó al ministro de Asuntos Exteriores, Fernando Castiella. Le pidió que España facilitara la salida de los miles de españoles que se agolpaban en el puerto de Orán. Le hizo esperar 20 minutos y le anunció “que salían para Argelia dos transbordadores escoltados por barcos de guerra para traerse a aquella gente”, declaró el alcalde a Información.
La orden la dio el propio general Franco, pero otro general, Charles de Gaulle, tardó tres días hasta autorizar a atracar al Virgen de África y al Victoria en Orán. Cuando los buques volvieron a España, sus pasajeros desembarcaron dando vivas a Franco. No tardarían en tener aún más motivos de agradecimiento al dictador.
Las autoridades les documentaron y les ayudaron a encontrar alojamiento; la Cruz Roja atendió a los enfermos y la prensa local publicó sus nombres para ayudar a las familias separadas a encontrarse. Muchos habían llegado con lo puesto a Alicante y “los bancos les concedieron facilidades crediticias de las que nunca se beneficiaron los españoles”, sostiene Leo Palacio.
Con esos créditos abrieron supermercados, bares, restaurantes, discotecas, lavanderías, joyerías, pastelerías, etcétera. El 20% de los locales de ocio de Alicante “están en manos de nuestros compatriotas”, estimaba en 1970 el cónsul de Francia en la ciudad, Petiot de Laluisant, en un informe dirigido a su embajador en Madrid.
Robert Tabarot, que fue la figura más célebre del exilio francés en el Levante, inauguró entonces una pizzería en Benidorm. El Ayuntamiento le concedió un permiso excepcional para que permaneciese abierta hasta las seis de la madrugada “mientras todos sus competidores españoles debían cerrar mucho antes”, prosigue Palacio.
Veintitrés años antes, el carbonero Stanbrook había permanecido 72 horas ante las puertas del puerto de Orán pese al hacinamiento de sus pasajeros republicanos y a la escasez de víveres para alimentarlos. Cuando, por fin, desembarcaron, las mujeres y los niños fueron trasladados a una cárcel que iba a ser desmantelada y muchos hombres válidos fueron enviados a la fuerza a construir el ferrocarril transahariano. El contraste entre la acogida que brindó España a los inmigrantes de Argelia y Francia a los exiliados republicanos es apabullante.
Por algo Le Courrier du Soleil, el semanario que fundaron los franceses en Alicante, describía a Franco como el “Moisés de los tiempos modernos” y traducía al francés los editoriales de Arriba, el órgano del Movimiento Nacional, ese partido único sui generis que encabezaba el propio dictador.
El fervor franquista de los pieds-noirs les llevó a hacer campaña por el sí en el referéndum de diciembre de 1966 que supuso una puesta al día del régimen de Franco. Caravanas de coches con pancartas pegadas al capó en las que se podía leer Oui = Sí o manifestantes portando rótulos ensalzando a Franco recorrieron las calles de Alicante.
Agatángelo Soler, el alcalde, contaba que un puñado de emigrantes procedentes de Argelia acudió al Ayuntamiento “a romper sus pasaportes” franceses. Eran los más radicales, aquellos que renegaban de una patria que les había "traicionado" al conceder la independencia a la tierra en la que habían nacido.
Buena parte de los jefes de la Organización del Ejército Secreto (OAS, según sus iniciales en francés), que causó 2.200 muertos en su lucha contra la independencia, acabaron o, al menos, pasaron por Alicante. “Aquí estaban fuera del alcance de la justicia francesa y ni uno de ellos fue extraditado a Francia por las autoridades españolas”, recalca Juan David Sempere Souvannavong, profesor de la Universidad de Alicante que ha investigado a fondo el exilio de los pieds-noirs en España.
“Al principio debía acudir a diario a firmar en la comisaría de El Campello (Alicante)”, señala François Andugar, de 75 años, hijo de padres españoles emigrantes a Argel, exparacaidista francés y después agente de la OAS con numerosos golpes en su historial. “A los de la OAS, la policía española no nos perdía de vista”, añade.
Aun así, él y medio centenar de hombres de acción de la OAS se reagruparon, a finales de 1962, en Vallfogona (Lleida), en un campo de entrenamiento. “Aprendíamos a atracar bancos porque la prioridad era obtener fondos para reconstituir la organización en Francia y, algún día, atentar contra De Gaulle”, prosigue. El proyecto fracasó.
Andugar confirma así un rumor, recogido entonces por la prensa francesa, sobre la existencia en España de campos de la OAS, pero sin aportar pruebas. “Hubo otro recinto de entrenamiento, efímero, por Vistahermosa”, pegado a Alicante, revela Jean Leonard Decouty, de 81 años, otro miembro de la OAS, pero que nunca estuvo en Argelia. “Luché desde la metrópoli”, explica, y para librarse de la justicia huyó a Alicante, donde abrió un restaurante de postín.
Decouty evoca con nostalgia el paso por Alicante de los cabecillas de la OAS como Joseph Ortiz o Pierre Lagaillarde, exdiputado de Argel, que consiguió un empleo en el economato del colegio francés que abrieron los pieds-noirs, en 1962, tras hacer una colecta. La mujer de Lagaillarde impartía clases de física.
“Qué duda cabe que al principio el colegio tenía un tufillo a OAS”, reconoce Manuel García, de 77 años, hijo de emigrantes alicantinos a Argel, que fue director del establecimiento en los ochenta. “El Ministerio de Educación [francés] lo observaba con recelo” y, tras su fundación, tardó una década hasta otorgarle su reconocimiento.
Para aquellos capitanes de la OAS, España no era una tierra extraña. Su organización fue fundada en Madrid, en el hotel Princesa, en diciembre de 1960, por el general Raoul Salan ayudado por Ramón Serrano Suñer, el cuñadísimo de Franco.
La impronta de la OAS aún persiste, medio siglo después, entre la colonia francesa en Alicante. El candidato del Frente Nacional en las legislativas francesas de junio para la circunscripción de la península Ibérica fue un pied-nord, Alain Lavarde, de 66 años, hijo de un agente de aquel ejército secreto que tantos atentados perpetró. Está orgulloso de su resultado: “Obtuve el 22,8% de los sufragios en Alicante, un porcentaje que triplica a mi media en España”.
OS ARGELINOS TÊM DIREITOS "SAGRADOS" DESDE QUE PISEM SOLO FRANÇÊS.JÁ OS FRANCESES QUE SE INSTALEM NA ARGÉLIA PODEM MUITO BEM CONTINUAR A SER MORTOS...
SÃO ESTAS RECIPROCIDADES QUE SE APLICA, TAMBÉM POR CÁ.TEORIZADOS POR UMA PEQUENA MINORIA QUE SE DESAPARECESSE ERA UM ALÍVIO PARA A NAÇÃO PORTUGUESA POIS QUE TRAIDORES UMA VEZ, TRAIDORES SEMPRE! TANTO DESCOLONIZAM, COMO COLONIZAM SEMPRE COM GRANDES DESGRAÇAS PARA O ZÉ POVINHO QUE ELES ENGANAM COM O SEU "SISTEMA" DE PROPAGANDA TRAIDORA!!!DAQUELA QUE LHES FOI ENSINADA LÁ FORA E QUE AQUI ANDAM A TENTAR APLICAR APESAR DOS SEUS MESTRES JÁ TEREM FALIDO HÁ MUITO TEMPO...EMBORA ANDEM SEMPRE A ESCOLHER NOVOS "SÓIS" À MEDIDA QUE ELES VÃO CAINDO...
OS PATRIOTAS PORTUGUESES ESSES ANDAM COBARDEMENTE CALADOS OU VENDERAM-SE POR UM PRATO DE LENTILHAS DA MESA DO ORÇAMENTO...SÃO OS VIRAS CASACAS TRADICIONAIS!
TODA A TRAIÇÃO DEVE SER CASTIGADA.A VIDA DOS TRAIDORES NÃO DEVE TER VALOR NENHUM
O Fim das Nações?
Filed under: Comentário,Cultura,Teoria,União Europeia — Filipe Faria @ 15:05
O ex director da organização de saúde da ONU Brock Adams alegadamente proferiu uma das frases mais emblemáticas dos nossos tempos:
“Para atingir o governo mundial, é necessário remover das mentes dos homens o seu individualismo, a lealdade à família, tradições, nacionalismo patriota e dogmas religiosos”.
À primeira vista parece uma frase carregada de radicalismo que não merece demasiada atenção, mas o facto é desde o fim da segunda guerra mundial que as elites do mundo ocidental estão empenhadas em promover o fim destes supostos “vícios” da mente popular. Não é preciso procurar muito para verificar que o discurso “educativo” governamental europeu equipara o tradicional amor pela nação a uma forma de xenofobia perigosa e equipara o apego às tradições locais a uma espécie de negação anacrónica (e até patológica) da modernidade globalizada.
No ocidente, desde o pós-guerra que as nações passaram a ser vistas como perigosas, como entidades nocivas ao ser humano e que como tal precisam de ser diluídas, contidas ou, preferencialmente, abolidas. Nasceu assim a ideologia anti-nação, tal como o amor das elites pelo supranacionalismo, onde se destaca, naturalmente, o nascimento do projecto da União Europeia.
Como resultado, para estas elites, avançar para um governo europeu de um momento para o outro seria impossível devido à existência destes “vícios da mente” que ditam inexoravelmente que as pessoas se preocupam mais com os que pertencem ao seu grupo (nação ou família) do que com os que não pertencem, e como tal prezam a sua independência. Perante este obstáculo, as elites europeias optaram por uma integração opaca e à revelia dos povos, baseando-se no excelso modelo económico do futuro (o euro, o mercado único, harmonização legal e fiscal, eurobonds, etc…). Porém, como todas em todas as centralizações de poder, a competição económica jurisdicional perde-se e o relativo declínio económico torna-se um destino fatal. Contudo, não serão os actuais problemas económicos que destruirão as nações; os ex-países da União Soviética também passaram pelo declínio material comunista e conseguiram refazer a sua vida aderindo à economia de mercado e mantendo intacto o seu espírito nacional.
Não, dificilmente será pela via económica que as nações serão abolidas; o segredo para tal está, obviamente, na política de imigração que o supranacionalismo impunha. Este baseia-se numa ideia simples amplamente documentada por historiadores: se os nativos deixarem de ser as únicas vozes dentro das nações, estas perderão a sua força como entidades políticas e sociais. Inicialmente, a abolição de fronteiras foi feita entre os países da União Europeia, mas rapidamente se constatou que a migração permanente entre países europeus foi quase insignificante (tirando os casos mais recentes de países como a Roménia). As diferenças económicas entre países europeus não eram tão grandes ao ponto de desafiar em massa o apego dos europeus a viver nas suas nações. Perante este “fracasso”, avançou-se paralelamente com o plano B, imigração não-europeia; e esta estratégia, devido às diferenças económicas entre a Europa e os países de origem dos imigrantes, foi extremamente bem sucedida (principalmente para partidos de esquerda, que assim ganharam eleitorado).
Programas de refugiados, justificações de que os países precisam de imigração em massa para ter crescimento económico, a defesa da sustentação da segurança social pública, alegações de dívidas morais para com outros povos … todas as justificações serviram o propósito. Como consequência, países como o Reino Unido, França, Alemanha, Itália, Suécia, estão agora todos com grupos de imigrantes com números elevados que em vários casos chegam a rondar os 20% da população.
Chegados a este ponto, torna-se relevante questionar o que são nações e se estas podem de facto ser abolidas.
Uma nação é tipicamente definida como um grupo territorialmente circunscrito cujos elementos estão ligados por tradições, genealogia, valores, cultura, língua, religião e normas sociais. Naturalmente, uma nação nem sempre corresponde a um Estado soberano e muitas vezes existe apesar dessa falta de independência, mas é lógico que quando sentem a sua identidade em causa essa necessidade torna-se premente (e.g. País Basco, Catalunha, Escócia). Outra noção mais alargada de nação não implica um território específico mas apenas uma ligação familiar/cultural dispersa geograficamente, tal como era o caso dos judeus antes da formação do Estado de Israel.
De uma perspectiva evolutiva, o espírito de nação pode ser explicado com a formulação canónica da “Inclusive fitness” do biólogo William Hamilton, que postula que os indivíduos estarão sempre mais dispostos a sacrificar-se por outros indivíduos que estejam genealogicamente próximos do que por indivíduos que estão distantes; algo óbvio em relação a familiares, mas igualmente relevante para o espírito de nação como família alargada, em que o altruísmo devotado ao “in-group” (nação) é totalmente diferente do que é devotado ao “out-group” (os outros).
De facto, ao olhar-se para as chinatowns espalhadas pelo mundo ou para outras comunidades, rapidamente percebemos que os indivíduos por norma trazem “a nação” com eles, especialmente quando há uma diferença acentuada entre a nação receptora e a nação “exportadora”.
Assim sendo, é possível abolir as nações?
É possível que se consiga abolir uma ou duas ou 10 nações em concreto, mas dificilmente será possível abolir o conceito de nação como entidade real e orgânica. Dadas as tendências comportamentais humanas, as tentativas actuais de criar o homem universal sob o mesmo Estado estão muito provavelmente condenadas ao fracasso e não vão fazer mais do que baralhar os mapas das nações, com prováveis conflitos territoriais pelo meio.
O prémio Nobel e economista Thomas Schelling demonstrou no seu modelo de segregação que basta que os indivíduos tenham uma leve preferência pelos “seus” para que o mapa se transforme por completo levando a uma completa segregação territorial. Isto não é surpresa para ninguém, mas as elites ocidentais, munidos dos seus pensadores racionalistas, declararam guerra à tradição, para que no fim de todas as crispações entre grupos se volte a uma situação de independência grupal. É por isto que o problema da União Europeia (e dos EUA) está muito para além do Euro e das questões económicas. É sim um problema de conceptualização utópica da essência humana e de ignorância propositada sobre a história dos grupos na natureza.
Sem surpresa, os países orientais como o Japão ou a China não aderiram a estas ideologias anti-tradição e anti-nação; tal irá fazer com que não só possam manter as suas identidades, mas também com que consigam evitar todos os problemas que a ruinosa tentativa de criar novas identidades por decreto irá trazer.
Por conseguinte, o actual racionalismo anti-nação é possivelmente o maior inimigo das liberdades que o mundo ocidental enfrenta, mas este racionalismo enfrenta necessariamente um inimigo ainda maior: a nação.
O “Fim das Nações” Sai à Rua
Filed under: Política,Portugal,Teoria,União Europeia — Filipe Faria @ 18:14
Há algumas semanas escrevi um artigo onde abordava o fenómeno contemporâneo a que chamei de “ideologia anti-nação”. Resumidamente, escrevi que esta ideologia se traduzia pelo amor de grande parte das elites europeias pelo supranacionalismo e que este, para ser exequível, implica a destruição do sentimento popular de nação que impede a centralização política ao nível da União Europeia ou até, em última instância e num cenário futurista, ao nível da ONU. Como instrumentos económicos de centralização (e.g. o euro) prejudicam economicamente mas não alteram o sentimento nacional do grupo, o método usado para atingir este fim foi a imigração em massa: trazendo milhões de migrantes não-europeus para a Europa dá-se passos largos para o fim das nações europeias actuais. E é isto que tem sido feito desde o pós guerra, período em que as elites pensantes “decidiram” que as nações são hediondas e perigosas e que são para abolir se possível.
Na altura, alguns comentários interrogavam se este fenómeno que descrevi é uma ideologia ou uma conspiração. Na realidade, não acredito que uma conspiração a um nível tão elevado se pudesse sustentar tanto tempo devido a problemas evidentes de acção colectiva; como tal, a cola que vai sustentando este processo é de carácter ideológico. No entanto, isto não significa que os interesses individuais dentro desta moldura ideológica não sejam um forte motor motivacional para se jogar o jogo.
Ademais, aquilo que antes era uma evidência factual mas que raramente era verbalizado por agentes políticos foi agora colocado em público: Peter Sutherland, responsável da ONU por questões migratórias, disse abertamente que as nações europeias ainda sentem um sentimento de pertença aos seus, que ainda possuem considerável homogeneidade nacional, que ainda se sentem diferentes em relação a outros povos e que se a União Europeia quiser sobreviver terá de fazer o melhor que puder para acabar com essa homogeneidade pela via da imigração em massa. Ele dá o exemplo do Reino Unido como estando na vanguarda desse processo. E as estatísticas reveladas recentemente por um investigador do King’s College London confirmam-no:
Professor Hamnett says: “London as a whole now has an ethnic minority dominated secondary school system, akin to that of many large US cities, and the figure reaches 67 per cent in inner London. “This is also true of a small number of other towns and cities with large ethnic minorities, notably Slough (64 per cent), Leicester (58 per cent), Birmingham (52 per cent) and Luton (51 per cent). Manchester and Bradford are not far behind with 43 per cent.”
Como é óbvio, Peter Sutherland está a prescrever uma receita para o futuro da União Europeia sabendo que esta tem sido já perseguida desde o pós-guerra. Sutherland não é uma pessoa qualquer, tem já um currículo invejável constituído por prémios e posições profissionais de topo. Para além da sua actual posição na ONU, é também “chairman” da London School of Economics, já foi comissário europeu e director da “Organização Mundial de Comércio”, ocupou posições milionárias em algumas das maiores empresas do mundo como a BP ou a Goldman Sachs e pertence ao famigerado grupo Bilderberg.
Este é um senhor que representa a sua classe e pretende uma União Europeia como Estado “gestor” e “educativo” em todo o seu esplendor, mas claro, onde não irão viver muitos europeus. Por outras palavras, ao querer que a União Europeia acabe com a Portugalidade, com a “Englishness” e com as demais identidades nacionais, o que é pretendido é uma Europa cujo território não é nada mais do que um conjunto de indivíduos atomizados e sem ligações familiares/comunitárias que olharão para o grande Estado europeu como gestor das suas vidas. Estado este que Sutherland magnifica com o epíteto “o projecto mais nobre dos últimos 1000 anos”.
As elites que Sutherland tão bem representa estão equivocadas. A união imperialista que tanto ambicionam é uma utopia. Tal como eu deixei escrito no meu artigo, devido ao tribalismo e nepotismo inatos no ser humano, o que eles vão conseguir com esta engenharia social motivada por um sentido de construção imperialista é uma redefinição das nações europeias, com todos os custos que irão advir dos conflitos territoriais e civis.
Agora que as intenções destas elites são mais claras do que nunca (principalmente para quem ainda não tinha prestado atenção), resta esperar que o euro e este destrutivo projecto europeu sejam colocados rapidamente na prateleira histórica antes que os problemas em curso se acumulem de forma irreversível.
NUMA DEZENA DE ANOS IMPORTARAM E NACIONALIZARAM QUASE 10%.DEIXEM-NOS ANDAR QUE QUANDO DEREM CONTA ESTÃO A SER COMIDOS LÁ EM CASA...
PARA OS TRAIDORES NÃO DEVE HAVER COMPAIXÃO NEM DÚVIDA.SÓ O SEU SANGUE RESGATARÁ A HONRA PERDIDA.É BOM QUE OS FDP SAIBAM DISSO...
Filed under: Comentário,Cultura,Teoria,União Europeia — Filipe Faria @ 15:05
O ex director da organização de saúde da ONU Brock Adams alegadamente proferiu uma das frases mais emblemáticas dos nossos tempos:
“Para atingir o governo mundial, é necessário remover das mentes dos homens o seu individualismo, a lealdade à família, tradições, nacionalismo patriota e dogmas religiosos”.
À primeira vista parece uma frase carregada de radicalismo que não merece demasiada atenção, mas o facto é desde o fim da segunda guerra mundial que as elites do mundo ocidental estão empenhadas em promover o fim destes supostos “vícios” da mente popular. Não é preciso procurar muito para verificar que o discurso “educativo” governamental europeu equipara o tradicional amor pela nação a uma forma de xenofobia perigosa e equipara o apego às tradições locais a uma espécie de negação anacrónica (e até patológica) da modernidade globalizada.
No ocidente, desde o pós-guerra que as nações passaram a ser vistas como perigosas, como entidades nocivas ao ser humano e que como tal precisam de ser diluídas, contidas ou, preferencialmente, abolidas. Nasceu assim a ideologia anti-nação, tal como o amor das elites pelo supranacionalismo, onde se destaca, naturalmente, o nascimento do projecto da União Europeia.
Como resultado, para estas elites, avançar para um governo europeu de um momento para o outro seria impossível devido à existência destes “vícios da mente” que ditam inexoravelmente que as pessoas se preocupam mais com os que pertencem ao seu grupo (nação ou família) do que com os que não pertencem, e como tal prezam a sua independência. Perante este obstáculo, as elites europeias optaram por uma integração opaca e à revelia dos povos, baseando-se no excelso modelo económico do futuro (o euro, o mercado único, harmonização legal e fiscal, eurobonds, etc…). Porém, como todas em todas as centralizações de poder, a competição económica jurisdicional perde-se e o relativo declínio económico torna-se um destino fatal. Contudo, não serão os actuais problemas económicos que destruirão as nações; os ex-países da União Soviética também passaram pelo declínio material comunista e conseguiram refazer a sua vida aderindo à economia de mercado e mantendo intacto o seu espírito nacional.
Não, dificilmente será pela via económica que as nações serão abolidas; o segredo para tal está, obviamente, na política de imigração que o supranacionalismo impunha. Este baseia-se numa ideia simples amplamente documentada por historiadores: se os nativos deixarem de ser as únicas vozes dentro das nações, estas perderão a sua força como entidades políticas e sociais. Inicialmente, a abolição de fronteiras foi feita entre os países da União Europeia, mas rapidamente se constatou que a migração permanente entre países europeus foi quase insignificante (tirando os casos mais recentes de países como a Roménia). As diferenças económicas entre países europeus não eram tão grandes ao ponto de desafiar em massa o apego dos europeus a viver nas suas nações. Perante este “fracasso”, avançou-se paralelamente com o plano B, imigração não-europeia; e esta estratégia, devido às diferenças económicas entre a Europa e os países de origem dos imigrantes, foi extremamente bem sucedida (principalmente para partidos de esquerda, que assim ganharam eleitorado).
Programas de refugiados, justificações de que os países precisam de imigração em massa para ter crescimento económico, a defesa da sustentação da segurança social pública, alegações de dívidas morais para com outros povos … todas as justificações serviram o propósito. Como consequência, países como o Reino Unido, França, Alemanha, Itália, Suécia, estão agora todos com grupos de imigrantes com números elevados que em vários casos chegam a rondar os 20% da população.
Chegados a este ponto, torna-se relevante questionar o que são nações e se estas podem de facto ser abolidas.
Uma nação é tipicamente definida como um grupo territorialmente circunscrito cujos elementos estão ligados por tradições, genealogia, valores, cultura, língua, religião e normas sociais. Naturalmente, uma nação nem sempre corresponde a um Estado soberano e muitas vezes existe apesar dessa falta de independência, mas é lógico que quando sentem a sua identidade em causa essa necessidade torna-se premente (e.g. País Basco, Catalunha, Escócia). Outra noção mais alargada de nação não implica um território específico mas apenas uma ligação familiar/cultural dispersa geograficamente, tal como era o caso dos judeus antes da formação do Estado de Israel.
De uma perspectiva evolutiva, o espírito de nação pode ser explicado com a formulação canónica da “Inclusive fitness” do biólogo William Hamilton, que postula que os indivíduos estarão sempre mais dispostos a sacrificar-se por outros indivíduos que estejam genealogicamente próximos do que por indivíduos que estão distantes; algo óbvio em relação a familiares, mas igualmente relevante para o espírito de nação como família alargada, em que o altruísmo devotado ao “in-group” (nação) é totalmente diferente do que é devotado ao “out-group” (os outros).
De facto, ao olhar-se para as chinatowns espalhadas pelo mundo ou para outras comunidades, rapidamente percebemos que os indivíduos por norma trazem “a nação” com eles, especialmente quando há uma diferença acentuada entre a nação receptora e a nação “exportadora”.
Assim sendo, é possível abolir as nações?
É possível que se consiga abolir uma ou duas ou 10 nações em concreto, mas dificilmente será possível abolir o conceito de nação como entidade real e orgânica. Dadas as tendências comportamentais humanas, as tentativas actuais de criar o homem universal sob o mesmo Estado estão muito provavelmente condenadas ao fracasso e não vão fazer mais do que baralhar os mapas das nações, com prováveis conflitos territoriais pelo meio.
O prémio Nobel e economista Thomas Schelling demonstrou no seu modelo de segregação que basta que os indivíduos tenham uma leve preferência pelos “seus” para que o mapa se transforme por completo levando a uma completa segregação territorial. Isto não é surpresa para ninguém, mas as elites ocidentais, munidos dos seus pensadores racionalistas, declararam guerra à tradição, para que no fim de todas as crispações entre grupos se volte a uma situação de independência grupal. É por isto que o problema da União Europeia (e dos EUA) está muito para além do Euro e das questões económicas. É sim um problema de conceptualização utópica da essência humana e de ignorância propositada sobre a história dos grupos na natureza.
Sem surpresa, os países orientais como o Japão ou a China não aderiram a estas ideologias anti-tradição e anti-nação; tal irá fazer com que não só possam manter as suas identidades, mas também com que consigam evitar todos os problemas que a ruinosa tentativa de criar novas identidades por decreto irá trazer.
Por conseguinte, o actual racionalismo anti-nação é possivelmente o maior inimigo das liberdades que o mundo ocidental enfrenta, mas este racionalismo enfrenta necessariamente um inimigo ainda maior: a nação.
O “Fim das Nações” Sai à Rua
Filed under: Política,Portugal,Teoria,União Europeia — Filipe Faria @ 18:14
Há algumas semanas escrevi um artigo onde abordava o fenómeno contemporâneo a que chamei de “ideologia anti-nação”. Resumidamente, escrevi que esta ideologia se traduzia pelo amor de grande parte das elites europeias pelo supranacionalismo e que este, para ser exequível, implica a destruição do sentimento popular de nação que impede a centralização política ao nível da União Europeia ou até, em última instância e num cenário futurista, ao nível da ONU. Como instrumentos económicos de centralização (e.g. o euro) prejudicam economicamente mas não alteram o sentimento nacional do grupo, o método usado para atingir este fim foi a imigração em massa: trazendo milhões de migrantes não-europeus para a Europa dá-se passos largos para o fim das nações europeias actuais. E é isto que tem sido feito desde o pós guerra, período em que as elites pensantes “decidiram” que as nações são hediondas e perigosas e que são para abolir se possível.
Na altura, alguns comentários interrogavam se este fenómeno que descrevi é uma ideologia ou uma conspiração. Na realidade, não acredito que uma conspiração a um nível tão elevado se pudesse sustentar tanto tempo devido a problemas evidentes de acção colectiva; como tal, a cola que vai sustentando este processo é de carácter ideológico. No entanto, isto não significa que os interesses individuais dentro desta moldura ideológica não sejam um forte motor motivacional para se jogar o jogo.
Ademais, aquilo que antes era uma evidência factual mas que raramente era verbalizado por agentes políticos foi agora colocado em público: Peter Sutherland, responsável da ONU por questões migratórias, disse abertamente que as nações europeias ainda sentem um sentimento de pertença aos seus, que ainda possuem considerável homogeneidade nacional, que ainda se sentem diferentes em relação a outros povos e que se a União Europeia quiser sobreviver terá de fazer o melhor que puder para acabar com essa homogeneidade pela via da imigração em massa. Ele dá o exemplo do Reino Unido como estando na vanguarda desse processo. E as estatísticas reveladas recentemente por um investigador do King’s College London confirmam-no:
Professor Hamnett says: “London as a whole now has an ethnic minority dominated secondary school system, akin to that of many large US cities, and the figure reaches 67 per cent in inner London. “This is also true of a small number of other towns and cities with large ethnic minorities, notably Slough (64 per cent), Leicester (58 per cent), Birmingham (52 per cent) and Luton (51 per cent). Manchester and Bradford are not far behind with 43 per cent.”
Como é óbvio, Peter Sutherland está a prescrever uma receita para o futuro da União Europeia sabendo que esta tem sido já perseguida desde o pós-guerra. Sutherland não é uma pessoa qualquer, tem já um currículo invejável constituído por prémios e posições profissionais de topo. Para além da sua actual posição na ONU, é também “chairman” da London School of Economics, já foi comissário europeu e director da “Organização Mundial de Comércio”, ocupou posições milionárias em algumas das maiores empresas do mundo como a BP ou a Goldman Sachs e pertence ao famigerado grupo Bilderberg.
Este é um senhor que representa a sua classe e pretende uma União Europeia como Estado “gestor” e “educativo” em todo o seu esplendor, mas claro, onde não irão viver muitos europeus. Por outras palavras, ao querer que a União Europeia acabe com a Portugalidade, com a “Englishness” e com as demais identidades nacionais, o que é pretendido é uma Europa cujo território não é nada mais do que um conjunto de indivíduos atomizados e sem ligações familiares/comunitárias que olharão para o grande Estado europeu como gestor das suas vidas. Estado este que Sutherland magnifica com o epíteto “o projecto mais nobre dos últimos 1000 anos”.
As elites que Sutherland tão bem representa estão equivocadas. A união imperialista que tanto ambicionam é uma utopia. Tal como eu deixei escrito no meu artigo, devido ao tribalismo e nepotismo inatos no ser humano, o que eles vão conseguir com esta engenharia social motivada por um sentido de construção imperialista é uma redefinição das nações europeias, com todos os custos que irão advir dos conflitos territoriais e civis.
Agora que as intenções destas elites são mais claras do que nunca (principalmente para quem ainda não tinha prestado atenção), resta esperar que o euro e este destrutivo projecto europeu sejam colocados rapidamente na prateleira histórica antes que os problemas em curso se acumulem de forma irreversível.
NUMA DEZENA DE ANOS IMPORTARAM E NACIONALIZARAM QUASE 10%.DEIXEM-NOS ANDAR QUE QUANDO DEREM CONTA ESTÃO A SER COMIDOS LÁ EM CASA...
PARA OS TRAIDORES NÃO DEVE HAVER COMPAIXÃO NEM DÚVIDA.SÓ O SEU SANGUE RESGATARÁ A HONRA PERDIDA.É BOM QUE OS FDP SAIBAM DISSO...
OS INTERNACIONALISTAS QUANTOS CIGANOS DE LESTE JÁ AUMENTARAM À CARGA?DA SEGURANÇA SOCIAL EVIDENTEMENTE...
Des gens du voyage ont intégré la famille des mafias
Mots clés : Police Judiciaire, DCPJ, Banditisme, Mafia, Seine-Saint-Denis, France, Dimitri Zoulas
Campement de gens du voyage à Strasbourg. La police surveillerait plusieurs centaines de personnes.
Selon une note de la PJ, des membres de cette communauté se sont constitués en véritables groupes criminels.
«Certaines familles issues de la communauté française des gens du voyage se sont constituées en véritables groupes criminels». Elles «se sont hissées jusqu'aux plus hautes sphères du grand banditisme». Ce constat inquiétant est dressé par la Direction centrale de police judiciaire (DCPJ), dans une note toute fraîche, du 22 juin, que Le Figaro a pu consulter. Ce document émane du Service d'information, de renseignement et d'analyse stratégique sur la criminalité organisée (Sirasco), dirigé par le commissaire Dimitri Zoulas. Un organisme qui avait déjà produit un rapport choc sur les mafias en France, il y a cinq mois à peine.
Cette fois le focus porte sur les membres d'une communauté «disposant de la nationalité française et ayant eu une tradition de nomadisme bien que dorénavant largement sédentarisée (Roms, Tsiganes, Sintés, Manouches, Gitans, Bohémiens…). Leur nombre est estimé entre 400 000 et 500 000», précisent les analystes policiers qui ajoutent: «Une autre composante plus récente est constituée des Roms migrants, arrivés des pays d'Europe centrale et orientale et dont le nombre est évalué entre 20 et 25 000».
«Seule une infime minorité de cette vaste communauté attire l'attention de la police», s'empresse de souligner un expert de ces questions à la PJ. Combien au juste? «Difficile à évaluer, disons quelques centaines d'individus déterminés, au casier souvent bien chargé», spécule un haut fonctionnaire. La note, en tout cas, évoque des comportements qui n'ont plus rien à voir avec le traditionnel folklore de la mendicité agressive en ville ou des cambriolages en série et autres larcins des aigrefins qui écument les campagnes.
En Seine-Saint-Denis, par exemple, ces groupes ont pris la dimension d'une véritable «pègre locale», selon un commissaire, «diversifiant leurs activités vers le trafic de stupéfiants, le faux monnayage, les attaques à l'explosif de véhicules blindés de transport de fonds ou le racket d'établissements de nuit à grande échelle», souligne le service de renseignement de la PJ.
Dans un précédent rapport, le Sirasco pointait déjà du doigt «la frange criminalisée de la communauté Barengri, manouches de l'Est implantés en France depuis un siècle». Elle apparaît, selon la PJ, «plus violente et à l'origine de nombreux vols d'envergure, spécialement commis au préjudice de transports de fret (cigarettes, parfums, etc.), d'entrepôts, mais également dans des agressions à domicile de victimes ciblées, en utilisant différents stratagèmes (véhicules volés, fausse tenue de policier ou gendarme).»
Les coups se sont multipliés ces derniers mois, d'attaques de fourgons en centre-forts, sans parler de la prédation entre gangs. Car la note du 22 juin indique que les Barengri «ont également développé un véritable racket à l'encontre des charrieurs (arnaqueurs de hauts vols gravitant au sein de la communauté), pour récupérer une partie des gains très importants générés par les escroqueries “aux jades” (pierre semi-précieuse contrefaite)». Selon la police, «ce racket s'est traduit depuis plusieurs années par de nombreuses affaires intra-communautaires d'enlèvements avec séquestrations». Des différends peu médiatisés, car au sein de la communauté, on préfère laver son linge sale en famille…
Les Hornec, cette fratrie de gens du voyage qui s'illustra dans le grand banditisme au milieu des années 1990, ont-ils fait des émules? La radicalisation de la génération qui suit représente, en tout cas, un sérieux défi pour la Place Beauvau. Car elle semble beaucoup plus organisée. «Des liens avec les groupes criminels issus des cités ont également été établis, les investigations démontrant régulièrement des coactions dans la commission des vols à main armée ou dans l'organisation de trafics de stupéfiants», alerte aujourd'hui le Sirasco .
O QUANTO PIOR MELHOR DARÁ UM DIA FRUTOS?OU A MALTA VAI CORTAR PESCOÇOS?POR ACASO OS "NOSSOS CIGANOS" FORAM NACIONALIZADOS JÁ DEPOIS DO 25.COMO ANDAVAM CÁ HÁ 500 ANOS TDOS OS ANTERIORES GOVERNANTES ERAM CERTAMENTE PARVOS TOPAM?
PS
QUANDO ALGUÉM VIR UM CIGANO A TRABALHAR COMO UMA PESSOA NORMAL QUE TIRE UMA FOTOGRAFIA PORQUE É "HISTÓRICA"...
Mots clés : Police Judiciaire, DCPJ, Banditisme, Mafia, Seine-Saint-Denis, France, Dimitri Zoulas
Campement de gens du voyage à Strasbourg. La police surveillerait plusieurs centaines de personnes.
Selon une note de la PJ, des membres de cette communauté se sont constitués en véritables groupes criminels.
«Certaines familles issues de la communauté française des gens du voyage se sont constituées en véritables groupes criminels». Elles «se sont hissées jusqu'aux plus hautes sphères du grand banditisme». Ce constat inquiétant est dressé par la Direction centrale de police judiciaire (DCPJ), dans une note toute fraîche, du 22 juin, que Le Figaro a pu consulter. Ce document émane du Service d'information, de renseignement et d'analyse stratégique sur la criminalité organisée (Sirasco), dirigé par le commissaire Dimitri Zoulas. Un organisme qui avait déjà produit un rapport choc sur les mafias en France, il y a cinq mois à peine.
Cette fois le focus porte sur les membres d'une communauté «disposant de la nationalité française et ayant eu une tradition de nomadisme bien que dorénavant largement sédentarisée (Roms, Tsiganes, Sintés, Manouches, Gitans, Bohémiens…). Leur nombre est estimé entre 400 000 et 500 000», précisent les analystes policiers qui ajoutent: «Une autre composante plus récente est constituée des Roms migrants, arrivés des pays d'Europe centrale et orientale et dont le nombre est évalué entre 20 et 25 000».
«Seule une infime minorité de cette vaste communauté attire l'attention de la police», s'empresse de souligner un expert de ces questions à la PJ. Combien au juste? «Difficile à évaluer, disons quelques centaines d'individus déterminés, au casier souvent bien chargé», spécule un haut fonctionnaire. La note, en tout cas, évoque des comportements qui n'ont plus rien à voir avec le traditionnel folklore de la mendicité agressive en ville ou des cambriolages en série et autres larcins des aigrefins qui écument les campagnes.
En Seine-Saint-Denis, par exemple, ces groupes ont pris la dimension d'une véritable «pègre locale», selon un commissaire, «diversifiant leurs activités vers le trafic de stupéfiants, le faux monnayage, les attaques à l'explosif de véhicules blindés de transport de fonds ou le racket d'établissements de nuit à grande échelle», souligne le service de renseignement de la PJ.
Dans un précédent rapport, le Sirasco pointait déjà du doigt «la frange criminalisée de la communauté Barengri, manouches de l'Est implantés en France depuis un siècle». Elle apparaît, selon la PJ, «plus violente et à l'origine de nombreux vols d'envergure, spécialement commis au préjudice de transports de fret (cigarettes, parfums, etc.), d'entrepôts, mais également dans des agressions à domicile de victimes ciblées, en utilisant différents stratagèmes (véhicules volés, fausse tenue de policier ou gendarme).»
Les coups se sont multipliés ces derniers mois, d'attaques de fourgons en centre-forts, sans parler de la prédation entre gangs. Car la note du 22 juin indique que les Barengri «ont également développé un véritable racket à l'encontre des charrieurs (arnaqueurs de hauts vols gravitant au sein de la communauté), pour récupérer une partie des gains très importants générés par les escroqueries “aux jades” (pierre semi-précieuse contrefaite)». Selon la police, «ce racket s'est traduit depuis plusieurs années par de nombreuses affaires intra-communautaires d'enlèvements avec séquestrations». Des différends peu médiatisés, car au sein de la communauté, on préfère laver son linge sale en famille…
Les Hornec, cette fratrie de gens du voyage qui s'illustra dans le grand banditisme au milieu des années 1990, ont-ils fait des émules? La radicalisation de la génération qui suit représente, en tout cas, un sérieux défi pour la Place Beauvau. Car elle semble beaucoup plus organisée. «Des liens avec les groupes criminels issus des cités ont également été établis, les investigations démontrant régulièrement des coactions dans la commission des vols à main armée ou dans l'organisation de trafics de stupéfiants», alerte aujourd'hui le Sirasco .
O QUANTO PIOR MELHOR DARÁ UM DIA FRUTOS?OU A MALTA VAI CORTAR PESCOÇOS?POR ACASO OS "NOSSOS CIGANOS" FORAM NACIONALIZADOS JÁ DEPOIS DO 25.COMO ANDAVAM CÁ HÁ 500 ANOS TDOS OS ANTERIORES GOVERNANTES ERAM CERTAMENTE PARVOS TOPAM?
PS
QUANDO ALGUÉM VIR UM CIGANO A TRABALHAR COMO UMA PESSOA NORMAL QUE TIRE UMA FOTOGRAFIA PORQUE É "HISTÓRICA"...
A EMMANUELLE FOI O FILME DA "LIBERDADE"
A SEGUIR AO 25 VEIO DE TUDO.FOI A LIBERTAÇÃO.MUITA FODA FOI DADA DE MANEIRA DIFERENTE PARA "EXPERIMENTAR" O QUE A RAPAZIADA VIU NO FILME
MAS AFINAL NÓS TIVEMOS NAQUELA ÉPOCA "AVANÇOS" AINDA MAIORES.UMA EMMANUELLE CASEIRA, DEPOIS JORNALISTA FAMOSA.A SER FODIDA NAQUELA ÉPOCA POR UM PRETO NA PRAIA...UM VISLUMBRE DA NOSSA AFRICANIZAÇÃO ACTUAL...EM QUE ATÉ OS HOMENS PREFEREM OS PRETOS...
AGORA SÓ FALTA O MENEZES FAZER OS BAIRROS SOCIAIS MULTICULTURAIS PARA ACELERAR O NOSSO ENRIQUECIMENTO.SEMPRE COM BASE EM MAIS SUBSÍDIOS CLARO...
Alteração de subsídio de maternidade aumenta protecção, diz Marco António Costa
O secretário de Estado da Solidariedade e Segurança Social, Marco António Costa, esclareceu hoje que as taxas de maternidade não foram reduzidas e que a proteção foi aumentada por recomendação do provedor de justiça.
QUANTO MAIS "A CADA UM SEGUNDO AS SUAS NECESSIDADES" MAIOR SERÁ A VELOCIDADE DA NOSSA AFRICANIZAÇÃO.TAL COMO DEVIDAMENTE PLANEADO.POR CONTA DO INDIGENATO...
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